A ustedes, padres:

El Día del Padre es un gran día. Se presenta como el inicio anual del verano donde los padres y los niños pueden disfrutar de largos días de juego al aire libre en lo profundo del calor de la noche. Los fines de semana de barbacoa muestran las habilidades culinarias de papá con hamburguesas, perros y mazorcas de maíz justo al lado de la parrilla. Papá: la plataforma desde la que saltar al agua, la fuente de la risa tonta, el ancla en las tormentas, el sol que trae calor y crecimiento.

Hay un ideal al que aspiran jóvenes y viejos: ser ese hombre que encarna los rasgos de bondad, solidez, carácter, fuerza y sabiduría. Esa noción solo comienza a formar una imagen en la mente cuando un joven se convierte en padre. La motivación para crecer nace con el entendimiento cierto de que en algún momento un niño mirará hacia arriba y verá el modelo de cómo debe hacerse. Con cada año que pasa, un niño acelera, y papá tendrá que esforzarse un poco más para mantenerse a la vanguardia. Es sorprendente lo rápido que pasa el tiempo y el papel de papá se transforma de dios omnisciente a papá el consejero de confianza. Pero todo está bien. El ideal permanece y la posición familiar del padre es respetuosamente firme bajo las siguientes condiciones importantes:

  • Papá debe nutrir una relación íntima amorosa y creciente con mamá. Habrá muchos problemas que resolver: crianza de los hijos, sexo, dinero, suegros, liderazgo, espiritual, etc. – Pero conflicto no significa animosidad. Navegar por estos temas de la vida es lo que hace que un hombre sea un hombre. Arranca las malas hierbas y riega el jardín.
  • Papá debe evitar las hipocresías de la vida tanto como sea posible. Si los niños no pueden usar sus teléfonos celulares durante la cena, ídem. Si los niños van a ayudar en la casa, entonces es una cosa de familia. Y, lo que es más importante, el optimismo de “sí se puede” se atrapa, no se enseña. Un niño aprende de su ejemplo mucho antes de que usted pueda explicarlo con palabras.
  • Papá debe ser digno de confianza. Llegar a tiempo dice: “Te valoro”. Beber moderadamente dice: “Mantengo el control”. Evitar situaciones comprometedoras dice: “Soy digno de confianza cuando estoy lejos de casa, fiel a mamá y a la familia”. Hacer humor positivo y no mordaz dice: “Tu psique impresionable está a salvo conmigo”.
  • Papá debe animar la identidad familiar. “Somos Marrs. Decimos la verdad, hacemos nuestro mejor esfuerzo, somos respetuosos con los demás, tenemos fe y optimismo de que todos los resultados son de alguna manera los mejores, que somos mejores amigos y que hay un Dios y Él es un Dios personal interesado en nuestro bienestar”. Los valores tradicionales aseguran el bienestar familiar más fácilmente que los valores seculares, no perfectamente, pero más fácilmente.

El Día del Padre es un día reservado para honrar al padre de uno por lo que es, por todas sus cualidades demasiado numerosas para enumerarlas, por los sacrificios que ha hecho y los que aún están por hacer. Hay un ideal allí, un “ness” de papá que no puede ser sustituido.  Esa esencia está plantada profundamente en los corazones de los niños, pero puede ser minuciosamente desarraigada por papá que no invierte las condiciones anteriores: ama a mamá, presta atención a las hipocresías, demuestra en comportamientos grandes y pequeños confiabilidad y anima a la familia.

Para ustedes, jóvenes padres, el ideal de que ustedes sean el estándar por el cual sus hijos evaluarán a todos los demás hombres es algo real. Tus hijas se casarán con hombres que resuenen tus cualidades. Tus hijos te emularán de maneras que te sorprenderán. Sé bueno, sólido, un hombre de carácter, fuerza y sabiduría.

Sé el papá ideal.

Feliz Día del Padre Hombres.

Dave y Lis